Pablo Caballero Payán El Sábado de Pasión de 1995, mientras realizaba la estación de penitencia con la Hermandad Sacramental de San Juan de Aznalfarache, vi a través de las ventanas de la peña sevillista de mi pueblo un golazo que me dejó boquiabierto. Menéndez botó un saque de esquina desde el costado izquierdo y el balón lo enganchó Luis Márquez con una volea espectacular, logrando un golazo increíble que supuso el primero de los dos goles con los que el Real Betis Balompié derrotó al Atlético de Madrid y se afianzaba en la parte alta de una Liga de la que acabó siendo el tercer mejor equipo y el menos goleado siendo un recién ascendido.

Sin duda fue el gol más icónico que el canterano bético logró con la camiseta verdiblanca. Otro muy recordado fue el que abrió el marcador en Burgos la célebre tarde en la que el conjunto de Serra Ferrer retornó a Primera División tras tres largas temporadas en la categoría de plata. Luis Márquez defendió el escudo de las trece barras en 202 ocasiones (partidos de Primera División, Segunda División, Copa del Rey, Recopa de Europa y Copa de la UEFA), logrando 16 goles. Juan Corbacho le hizo debutar con 19 años en febrero de 1990 en Palamós y su último partido con el Real Betis Balompié fue en mayo de 1999 en Villarreal, con Javier Clemente como entrenador bético. Fue un futbolista importante en sus primeros años en la primera plantilla bética, destacando su capacidad física y su excelente golpeo con su pierna diestra. Logró dos ascensos, tres clasificaciones europeas y ser subcampeón de Copa. Tras abandonar Heliópolis militó en Real Valladolid, el Pontevedra CF y el Real Jaén, colgando las botas en 2005.

Hoy, tristemente, se ha marchado para siempre al eterno Cuarto Anillo tras varios años padeciendo una grave enfermedad de la que no ha podido recuperarse. Que sirva este breve recordatorio para honrar desde nuestra web sus años defendiendo nuestros colores. Un abrazo sincero y enorme para sus familiares y seres queridos. Descansa en paz Luis.

Foto Principal: Roberto Pardo