Real Betis Balompié 1 (Navas en propia puerta) – Sevilla FC 1 (Gudelj)

Pablo Caballero Payán Empate a uno en un derbi sevillano marcado por las justas expulsiones de Montiel, Fekir y Borja Iglesias y que le sirve al Real Betis para conservar su puesto de Liga de Campeones y al Sevilla FC salir de los puestos de descenso. Los béticos se van mosqueados por el resultado y los sevillistas lo celebran como un triunfo, aunque jugaron cuarenta y cinco minutos con uno más. Cada uno pone el listón de la exigencia donde le viene en gana.

La primera parte fue de claro dominio verdiblanco. Los de Pellegrini inquietaron más el área rival (el Sevilla solo una vez) y gozó de tres claras ocasiones. La primera fue un balón al palo tras una falta sacada por Fekir. A los veinte minutos llegó la segunda, cuando Aitor Ruibal se plantó ante Bono y lanzó su chut demasiado alto. En el minuto treinta y cinco se ponían las cosas muy de cara para los béticos con la expulsión de Montiel por una dura entrada sobre Alex Moreno. Sólo cinco minutos después de esa acción llegó el 1-0. Rekik despejó el balón, rebotó en Jesús Navas y Bono no acertó a despejarla. El derbi se ponía de dulce para los de Heliópolis, pero tras ese gol todo empezó a torcerse. Porque un par de minutos después Fekir soltó un manotazo innecesario sobre la cara de Papu Gómez y el árbitro, tras consultar el VAR, expulsó al francés. Se igualaba en número de jugadores las cosas pero sobre el césped seguía el Betis siendo superior. Justo antes del descanso Borja Iglesias tuvo el 2-0 en sus botas, pero falló en el mano a mano ante el portero sevillista.

La segunda mitad comenzó como concluyó la primera. El Betis dominaba y fruto de ese claro dominio gozó de una inmejorable oportunidad para logra aumentar la distancia en el marcador, pero otra vez, en esta ocasión Alex Moreno, erró en el uno contra uno ante Bono. Y a renglón seguido llegó la expulsión de Borja Iglesias por un claro pisotón a destiempo. Justa y merecida roja que ponía las cosas muy difíciles. A partir de ahí, los de Pellegrini se defendieron con uñas y dientes y solo sucumbieron ante un chut lejano de Gudelj en el minuto ochenta y uno. El propio jugador serbio tuvo en los minutos finales otras dos ocasiones para haberle dado el triunfo a los suyos, pero el larguero y Claudio Bravo impidieron el gol.

Y así se llegó al final de un derbi que el Betis tiró por la borda cuando mejor lo tenía ante un rival pobre en su propuesta futbolística. Es una pena desperdiciar oportunidades así y no queda otra que hacer autocrítica y seguir trabajando para crecer aún más. Ahora toca pensar ya en la cita del jueves en Valencia, donde los verdiblancos tienen la oportunidad de irse al parón por el Mundial instalados en la zona que da acceso a jugar la Liga de Campeones.

Lo mejor: ver al director deportivo del Sevilla FC darse golpes en el pecho al borde del llanto por haber empatado ante un rival en inferioridad, estando su equipo empatado a puntos con la zona de descenso siendo el cuarto presupuesto de Primera División.

Lo peor: las dos expulsiones que han privado al Betis de una clara victoria ante un pobre rival.