AS Roma 1 (Dybala de penalti) – Real Betis Balompié 2 (Guido Rodríguez y Luiz Henrique)
Pablo Caballero Payán Enorme y fundamental victoria la que se trae el Rea Betis de Roma, donde ha corroborado que es un equipo muy serio, que confía ciegamente en sus posibilidades y sabe sufrir para esperar a su momento y llevarse el gato al agua. Hoy superó el verse por detrás en el marcador y el contratiempo de una nueva lesión muscular de Nabil Fekir. El pleno de triunfos en la Europa League le deja a las puertas de la clasificación para la siguiente ronda.
No fue buena la puesta en escena de los de Pellegrini. Salieron algo nerviosos e indecisos al terreno de juego y le costó algunos minutos cogerle el pulso al partido. Cuando lo hizo, comenzó a merodear el área romana con tres chuts lejanos de Canales, Fekir y Guardado. El primero y el tercero se encontraron con Rui Patricio y el segundo se estrelló en el palo. Y cuando mejor pintaban las cosas para el Betis llegó el gol de la Roma. Dybala transformó un penalti señalado a instancias del VAR por una clara mano de Ruibal. Ya se había lesionado Fekir antes del 1-0 y el partido se ponía bastante feo, pero los verdiblancos reaccionaron de la mejor manera posible: avisó Luiz Henrique con un disparo que le salió centrado y fue el brasileño el que habilitó a Guido Rodríguez para que el argentino se sacara un potentísimo chut que se coló pegado al poste de la portería rival. Golazo para igualar el marcador y hacer justicia a lo que se estaba viendo sobre el césped. Antes del descanso pudo adelantarse de nuevo el equipo local con una maravillosa volea de Dybala respondida por Claudio Bravo con una parada antológica.
Volvió a ser protagonista el portero chileno tras la pausa al realizar otra paradón de mucho mérito en un chut a bocajarro. El partido fue perdiendo algo de intensidad conforme pasaban los minutos y ninguno de los dos equipos eran capaces de imponerse con claridad al otro y disponer de ocasiones claras para ponerse por delante. La entrada de William Carvalho fue fundamental para que el Real Betis desequilibrar un poco la balanza en el centro del campo y empezara a crear jugadas prometedoras en ataque. Faltaban un par de minutos para llegar al final del tiempo reglamentario cuando Rodri agarró la pelota en el extremo izquierdo y se sacó un pase con rosca al segundo palo, por donde a pareció el salto y la cabeza de Luiz Henrique para mandar el balón a gol y llevar el delirio a los cinco mil béticos que se dieron cita en el Olímpico de Roma. De ahí al final, control y serenidad para defender el botín y lograr tres puntos de oro.
Hemos vivido una gran noche europea, de las que recordaremos siempre. Es elogiable la capacidad que tiene el Real Betis para competir con garantías, sobreponerse a los obstáculos que se presentan y dar el golpe de gracia cuando hay que darlo. Poco más se puede pedir a este equipo. La exigencia es máxima pero no se huye de ella. Ahora a cambiar el chip y pensar nuevamente en La Liga. Y a esperar que lo de Fekir sea poca cosa.
Lo mejor: la victoria y la capacidad de sacrificio y competitividad de este equipo.
Lo peor: la lesión de Fekir.
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