RC Celta de Vigo 1 (Gabri Veiga) – Real Betis Balompié 0

Pablo Caballero Payán Segunda derrota del Real Betis en la presente Liga tras perder por la mínima en Vigo ante un rival que jugó con un futbolista más desde el minuto veinte por la justa expulsión de Luiz Felipe. Los verdiblancos, a pesar de no sumar en la tarde de hoy, se mantienen en la parte alta de la clasificación y son cuartos con quince puntos.

El arranque del partido lastró por completo el desarrollo del mismo. Saltaron al césped con menos intensidad de lo habitual y muy inseguros. Antes del minuto dos ya gozó el Celta de una clara ocasión tras un error de Edgar. No tardó en llegar el gol local. Fue tras una jugada en la que Canales, Paul y William Carvalho no estuvieron demasiado contundentes y eso lo aprovechó Gabri Veiga para controlar el balón, salir de la escasa presión de los medicampistas béticos y soltar un latigazo desde fuera del área ante el que nada pudo hacer Rui Silva. El encuentro se ponía feo por el resultado y por la imagen que ofrecía el equipo, pero aun así tuvo la oportunidad de enmendar la situación con una clara ocasión de Borja Iglesias que no supo aprovechar el nueve bético al toparse con Marchesín. Para colmo de males en el minuto veinte otro fallo garrafal en defensa supuso la expulsión de Luiz Felipe, poniéndose el partido muy cuesta arriba. Poco más de interés ocurrió en la primera mitad, con el Celta bastante cómodo sobre el césped y el Betis sin posibilidades de intentar equilibrar la inferioridad numérica imponiendo su superioridad en calidad.

Sin embargo todo cambió tras la pausa. La salida de Fekir provocó que los verdiblancos tomaran el mando del partido y viendo lo que sucedió en la segunda mitad, podemos asegurar sin dudarlo que el Real Betis mereció, al menos, levarse un punto de Balaídos. Hasta cinco oportunidades claras tuvieron los de Pellegrini para igualar el marcador. Alex Moreno, Willian José y Aitor Ruibal se toparon con Marchesín, Germán Pezzella cruzó demasiado su cabezazo y Joaquín no pudo dirigir a portería un chut desde el área pequeña tras un control orientado extraordinario. La imagen que dio el Real Betis en la segunda mitad fue magnífica, dando una lección de orgullo, personalidad y confianza en lo que se hace. Pasó por encima del rival pese a la inferioridad numérica y solo las buenas intervenciones del portero local y la falta de puntería impidieron que los de Heliópolis se fueran de vacío.

Ya toca pensar en el jueves y olvidar lo sucedido hoy. En Roma espera un gran partido que requerirá de mucha exigencia y en el que no se deben cometer los errores de la primera mitad. Hay que salir con más intensidad y concentración porque enfrente habrá un rival mucho más peligroso que el de hoy.

Lo mejor: la imagen del equipo en la segunda mitad.

Lo peor: los primeros veinte minutos del partido.

Foto Principal: La Liga