Rayo Vallecano 1 (Álvaro García) – Real Betis Balompié 2 (Borja Iglesias y William Carvalho)

Pablo Caballero Payán Victoria de mucha personalidad la lograda por el Real Betis en Vallecas que le permite afrontar el partido de vuelta con una ventaja muy buena pero que no debe suponer una confianza excesiva. El próximo tres de marzo habrá que ponerse el mono de trabajo, como lo ha hecho esta noche todo el equipo, para certificar el pase a la Final de Copa del Rey. A destacar el golazo de Borja Iglesias y la obra de arte de William Carvalho en el segundo gol bético.

Empezaron feas las cosas para el conjunto de Pellegrini. El Rayo Vallecano saltó al terreno de juego con una marcha más, imprimiéndole mucha intensidad a los primeros compases del partido. Eso le permitió adelantarse antes del minuto cinco, cuando Álvaro García le ganó la espalda a Sabaly para rematar a placer el pase de Balliu. El Real Betis poco a poco fue calmando el ímpetu rayista y equilibrando las fuerzas. Fekir se echó el equipo a la espalda y todo giraba alrededor de él, cuando se lo permitían las constantes y múltiples faltas de los rivales. El empate llegó a los veintiséis minutos. Borja Iglesias agarró la pelota en la frontal del área grande, se zafó de varios defensas y lanzó un chut potente y colocado ante el que nada pudo hacer Dimitrievski. La igualada le sentó de maravilla al equipo verdiblanco, que tuvo dos claras opciones de remontar antes del descanso. Fekir robó un balón en una zona peligrosa pero fue demasiado individualista y no se la dio rápido a Borja Iglesias que se encontraba en una inmejorable posición para plantarse ante el portero rayista. Y la segunda de ellas fue del delantero gallego, que se topó con el guardameta macedonio.

Tras el descanso volvió a salir mejor el conjunto local, que buscaba constantemente las internadas por las bandas, sobre todo por la izquierda, para hacerle daño al Real Betis. Fue fundamental en este tramo del partido la seguridad de Rui Silva en todos los balones aéreos que sobrevolaron el área verdiblanca. Y como ocurrió en la primera mitad, poco a poco los de Heliópolis fueron entonándose y equilibrando el dominio. Y entonces llegó la maravillosa jugada del 1-2. Tello encaró a Balliu, se la pasó a William Carvalho que estaba en la frontal del área y ahí dibujo el portugués un gol de película. Catena salió a su encuentro para tapar un posible chut lejano y William, a cámara lenta, le tiró un túnel antológico, se plantó ante Dimitrievski y definió con maestría. Llegaron entonces los mejores momentos del Real Betis, que pudo agrandar su ventaja con varias ocasiones a la contra que habrían dejado la Semifinal vista para sentencia. En los instantes finales apretó el Rayo Vallecano y ahí los pupilos de Pellegrini supieron sufrir, fajarse por completo y apretar los dientes para defender el resultado.

Queda poco menos de un mes para la vuelta y hasta entonces hay que dejarla olvidada. Toca demostrar que este equipo está capacitado para seguir compitiendo con garantía en la Liga y la Europa League. La temporada está siendo de sobresaliente y las sensaciones son las mejores. Tiene el equipo al alcance de la mano objetivos tan bonitos e importantes que no ilusionarse resulta complicado. Eso sí, cero confianzas y a seguir con la misma receta: humildad, trabajo, sacrificio y calidad.

Lo mejor: el resultado, el trabajo de todo el equipo y los dos golazos.

Lo peor: el arranque del partido.

Foto Principal: EFE