Pablo Caballero Payán @pablocpayan Será el calor que ya empieza a hacer estragos. Será que no encuentro motivo alguno para ser optimista. Será que estoy harto de estar harto. Será que ya no me creo nada. Pero lo cierto es que entre estas cosas y los pactos extrajudiciales, la poca ilusión que me provocan Haro, Catalán, Serra y Setién y la vacía alternativa de Arriba Betis Campeón, las ganas que tengo de Betis son mínimas.

Por partes, empezaré sobre el farragoso, inacabable y cansino tema judicial. Yo quiero que Lopera pague por todo el mal que le ha hecho al Real Betis Balompié. El único pacto que contemplo es que devuelva sus acciones, asuma su culpabilidad y se vaya a su hortera y cateta casa de la calle Jabugo sin recibir un puñetero euro. Lo que se salga un milímetro de estas condiciones, lo criticaré y lo repudiaré.

En cuanto a Haro y Catalán, he de decir que, tristemente, es la menos mala de las opciones que hay ahora mismo para gobernar al Betis. Así de triste. Su fracaso deportivo es evidente y bochornoso. Un mar de dudas es lo que tengo con la llegada de Serra Ferrer a la dirección deportiva. No nos engañemos, el mallorquín será el que marque las pautas del nuevo proyecto deportivo verdiblanco. Y por otro lado, la llegada de Setién no me ilusiona. Tengo un concepto del fútbol más pragmático y práctico que el estilo que propondrá el técnico cántabro.

Y para terminar con este trío de desilusiones voy con Salas y compañía. Si patética fue la puesta en escena de su candidatura el pasado 16 de mayo, la de ayer, en la que esbozó las trece líneas maestras de su proyecto, me sigue generando las mismas dudas: incongruencias, poco real y vacía de contenidos y nombres. A eso le unimos la chulería y la altanería del segundo de a bordo. Se lució Adrián Fernández con lo que dijo sobre Serra y Alfonso.

En serio, desde que colgó las botas en 2005, ¿qué es lo que ha hecho el ex delantero bético para pensar que será una eminencia en la dirección deportiva? Si tiene tal facilidad para descolgar el teléfono y que caigan rendidos a sus pies la panacea del fútbol mundial, ¿por qué no ha trabajado para otros clubs en estos 12 años? Es lamentable que esta sea la alternativa a la triste dirección actual del club verdiblanco. Y aun así, pienso que tienen serias opciones de llegar al poder. Preveo mucha abstención de accionistas y el apoyo de Castaño a esta candidatura puede ser decisivo.

Pasan los años, pasan presidentes, pasan entrenadores, pasan directores deportivos, pasan jugadores y lo que sigue sin pasar y sin llegar es la estabilidad del Real Betis Balompié. La entidad de Heliópolis lleva muchos años siendo la víctima de gente fracasada, incompetente y dañina. Y lo peor es que no se atisba en el horizonte nadie capaz de revertir la situación.

FOTO: www.betis.mobi