CFI Alicante 0 – Real Betis Balompié 4 (Tello, Lainez, Joaquín y Bartra)

Pablo Caballero Payán Victoria cómoda, sencilla y sin grandes esfuerzos la que obtuvo en la noche de ayer el Real Betis en su estreno en la Copa del Rey. Pellegrini alineó un equipo de total garantías ante un rival muy inferior que le puso mucho empeño pero que se vio totalmente sobrepasado por la superioridad física y técnica de los verdiblancos. Mañana viernes se sortearán los emparejamientos de la siguiente ronda.

Lo mejor para disipar dudas y no hacer valer el tópico de lo sorprendente que a veces es el torneo copero es afrontar un partido ante un rival de menor entidad con firmeza desde que echa el balón a rodar. Y eso fue lo que hizo el Betis en el Collao. A los siete minutos Tello enganchó un zapatazo potente desde fuera del área que se coló por la escuadra de la portería alicantina. Con todo de cara, a los de Pellegrini no les entró la mandanga y fueron a por más, para no tener más sustos de la cuenta. Así, Lainez aprovechó una asistencia de Joaquín para sentenciar la eliminatoria a los veintisiete minutos. Con ese resultado y con la diferencia abismal que había entre ambas escuadras, lo que había que hacer era no arriesgar mucho para no tener lesiones indeseadas y no gastar más energías que las precisas. Tras el descanso llegaron dos goles más para cerrar definitivamente el partido. Primero fue Joaquín el que recogió un rechace dentro del área para poner el 0-3, y luego, el gran capitán bético, asistió a Bartra para que el defensa catalán cabeceara a gol poniendo el 0-4 con el que acabó el encuentro.

Poco más hay que destacar de esta eliminatoria. Es justo reconocerle al rival su empeño y su ilusión por disputar un partido ante uno de los grandes del fútbol español. Seguro que los futbolistas del Independiente de Alicante jamás olvidarán el día de ayer. Por su parte, el Betis cumplió con su trabajo sin complicaciones y ya piensa en el partido del próximo sábado en el Camp Nou.

Lo mejor: que no hubo lesiones ni complicaciones y el golazo de Tello.

Lo peor: nada que destacar en el aspecto negativo.