JJ Barquín barquin_julio Les puedo asegurar que, leyendo o escuchando la prensa de esta ciudad, poca información veraz y contrastada les puede llegar. La prensa está muy desorientada desde la llegada del nuevo consejo de administración al club. Muy pocas filtraciones se ofrecen desde los salones nobles del Villamarín. Se trabaja de forma profesional y cada uno sabes cuáles son sus misiones dentro del estamento bético.

Un nuevo episodio de esto que les digo son las cuatro negaciones de Catalán. Ayer apareció el vicepresidente para dejar bien claro que con Setién nada de nada. Lo pueden creer o dudar, pero a mí se me hacía ilógico que volviera el cántabro. Y Josemi lo dejo más claro que San Pedro: no ha habido contactos; no lo han pedido los jugadores; no hay acuerdo alguno y, por último, no se ha votado su vuelta en el Consejo.

No pretendo convencer a nadie de la valía de este consejo. Como miembro de un foro de encuentros béticos, no les puedo trasladar lo que se habla en esas interesantes reuniones. Lo que sí puedo decirles es que todos los miembros del club que han pasado por el Restaurante Bolonia de Cartuja han demostrado seriedad, dignidad, sensatez y una exquisita profesionalidad. Tras finalizar cada encuentro, siempre ha venido a mi cabeza una reflexión que se repite continua y machaconamente: estamos en buenas manos.

Por supuesto que hay muchas cosas a mejorar y además nada más que un año se ha conseguido el objetivo marcado de Europa. Pero desgraciadamente, el fútbol no son matemáticas y, aunque muchos no lo crean, es un deporte donde también hay un alto porcentaje de azar y suerte. Lo que es indudable es que con la llegada de Haro y Catalán el crecimiento de la institución es constatable e irrefutable. Las instalaciones, la comunicación, la atención al socio, el nivel de la plantilla, la ciudad deportiva, etc. Insisto. Estamos en buenas manos. Todo llegará.

Foto: Real Betis