“Cuanto más oscura es la noche, más brillan las estrellas”

JJ Barquín @barquin_julio Había pensado comenzar este escrito lamentándome por las desgracias que nos trae la vida. Pero estoy seguro de que me habrías recomendado iniciarlo de otra manera. Y te voy a hacer caso, querido Jesús. Lo haré de una forma vitalista y positiva, siguiendo el ejemplo que nos ofreciste a lo largo de tus 26 años de vida.

Los expertos en Diderot resaltan que su escritura era una apuesta por la felicidad a toda costa. Decía el filósofo y padre de la Enciclopedia, que “sólo hay una virtud, la justicia y sólo un deber, ser feliz. Y una consecuencia, no exagerar la importancia de la propia vida ni temer a la muerte”.  Estoy seguro de que si hubieras vivido allá por 1750 habrías sido un alumno aventajado de sus doctrinas y pensamientos. Estas palabras del filósofo francés resumen tu corta pero valiosa vida.

Has dejado un gran vacío, Jesús. Bien lo saben tus padres, tu hermano, tus abuelos, tus tíos, toda la familia lo sabemos y lo sentimos. Pero también has dejado un legado existencial que nos debe servir como guía a todos. Tu formar de ser, de disfrutar de cada día, de ayudar a los demás, de vivir a tope con el rock and roll y con tus manualidades o de saber encarar el final, han sido y serán un ejemplo más allá de todos los recuerdos que nos invaden la mente cada día. Y, a partir de ahora, cuando vengan mal dadas, tendremos que tomar tu ejemplo y poner en práctica ese espíritu positivo y feliz que lo invadía todo con tu presencia.

Y estamos en semana de derbi. Y ahora, ¿qué hacemos Jesús? En una familia muy verdiblanca por Heliópolis y El Cerro del Águila, apareció un bando rojo y blanco por la barriada de La Plata. Ya sabes las bromas que nos gastábamos los primos cuando sale el fútbol en las reuniones familiares.  Como bien dice la canción de la chipionera más universal, que no daría yo por ver este Domingo el derbi contigo y poder decirte “Jesús, yo quiero que el Sevilla pierda hasta el avión”.

No podrá ser nunca más, pero te puedo asegurar que este derbi va a ser muy especial para quien escribe. Este Domingo, si ganamos será un alegrón, pero si perdemos, te puedo jurar que -por una vez- seré feliz, pues me acordaré que en alguna parte alguien estará feliz y con su eterna sonrisa.