Pablo Caballero Payán @pablocpayan Emotivo homenaje el que se le rindió anoche a una leyenda del Real Betis Balompié: Rubén Castro, máximo goleador de la historia del club verdiblanco. Aunque el acto estuvo cargado de emotividad, se quedó incompleto por culpa de la inoportuna lesión muscular que sufre el canario, que le impidió disputar el encuentro, que dicho sea de paso, mostró las carencias que aun tiene el equipo de Rubi a poco más de una semana para el comienzo de la Liga.

Aunque la fecha no era la más idónea (hay mucha gente de vacaciones fuera de Sevilla), más de veinte mil personas se dieron cita en las gradas del Benito Villamarín para rendirle el merecido homenaje al delantero insular. Rubén Castro saltó al césped del estadio de Heliópolis con la camiseta verdiblanca y el dorsal 24 a la espalda. A todos se nos vino a la mente los importantísimos goles que consiguió en momentos muy difíciles y convulsos. Estadísticamente no hay dudas de que Rubén ha sido el mejor delantero que ha defendido el escudo de las trece barras.

De los 148 goles anotados me voy a quedar con tres: los dos que le hizo al Valencia CF en el descuento para ganar el partido y la vaselina ante la AD Alcorcón que sirvió para iniciar la victoria que significaba el ascenso a Primera División. Creo que son los más significativos, pero hay muchísimos donde elegir, de todas las formas posibles. El único lunar de su trayectoria goleadora como bético, si se puede calificar así, es que no haya logrado superar el registro goleador de Poli Rincón como máximo anotador en Primera.

Y después llegó el encuentro entre el Real Betis y la UD Las Palmas, que dejó claro que el conjunto de Rubi necesita mejorar bastantes aspectos y que requiere de un esfuerzo por parte del club para reforzar una plantilla a la que le faltan, como mínimo, tres jugadores que eleven las prestaciones: un delantero centro, un centrocampista y un lateral zurdo. Con las recientes ventas de Junior y Lo Celso, esta última una cesión con obligación de compra que dejará más de 70 millones de euros en la caja bética, la Dirección Deportiva debe cerrar cuanto antes las nuevas incorporaciones.

Del partido cabe destacar en el aspecto positivo la indudable calidad de Nabil Fekir, que anoche anotó su primer gol como bético, y las buenas maneras mostradas por el joven portero Dani Martín. Como puntos negativos hay que señalar lo poco consistente que se mostró el equipo, las dificultades para atacar y la imagen plana y poco contundente. Es una obviedad que aun estamos en el periodo preparatorio y que las cosas no se consiguen de la noche a la mañana, pero creo que todos esperábamos un poco más a esta altura del mes de agosto. Veremos qué pasa en los próximos días.