JJ Barquín @barquin_julio Cada vez me cuesta más ir al Villamarín. No debería ser así, pero muchos amargados pululan por el estadio. Alrededor de mi localidad un grupo de quejicas me va a hacer comprar tapones para los oídos. Son atormentados profesionales, la Hermandad de los Afligidos. Para ellos, todo está mal. Si jugamos con dos delanteros, mal. Si jugamos con un delantero, mal. Si hay muchos jugones en el centro del campo, mal. Si hay mucho músculo, mal. Si se toca, mal. Si se dan pelotazos, mal. Son el Nobel de la negatividad.
Resulta curioso ver como ante un sistema con mucho riesgo y que los expone más de la cuenta, los jugadores están a muerte con el entrenador y creen en lo que hacen con una confianza ciega. Por el contrario, los que deberían estar disfrutando con el juego de su equipo y apoyando a los jugadores, se bajan del carro al primer error en el pase o fallo en una definición. El Betis de Setién es un ejercicio de fe, fortaleza y esperanza para todos menos para muchos aficionados. Evidentemente que ha habido grandes decepciones y malos partidos, pero lo positivo supera lo negativo sin lugar a duda.
Pero es que, por no disfrutar, no disfrutan ni de los jugadores a nivel individual. Pau, Bartra, Junior, Canales, Lo Celso, Tello, Guardado. Piensen por un momento en hace cinco años atrás. Esos nombres eran impensables verlos en el césped del Villamarín. Tienen calidad para dar y tomar y la ponen cada partido al servicio de nuestros sentidos. Desmarques, paradas, combinaciones, recortes, controles, disparos, etc. Pues ni por esas, siempre hay algo por lo que protestar, quejarse y abuchear. Atormentados de la vida.
Pocas veces en la historia de esta entidad un entrenador ha cambiado tanto la identidad de un equipo. Y lo está haciendo con una propuesta atractiva y arriesgada que, a su vez, sirve para facilitar la llegada de buenos peloteros al Betis. Además, no dejando de lado la cantera y dando sus frutos con gente como Loren o Junior. Por eso, resultan incomprensibles las críticas y la poca fe de muchos aficionados en este proyecto. Además, para los resultadistas, ayer los compañeros de Tintero Verdiblanco indicaban que Setién ya se codea con Serra y Patrick O’Connell como los mejores entrenadores en toda la historia del club en tanto por ciento de victorias. Pero ni por esas. Le han hecho la cruz y ya puede bajarnos la luna que será crucificado.
Sensaciones, datos y elogios alabando el fútbol de este Betis venidos desde dentro y fuera de nuestras fronteras, no sirven para que la afición al completo esté saboreando este menú futbolístico. Pues, que quieren que les diga, que peor para ellos. Yo, como muchos béticos, sigo disfrutando de este Betis y de los partidos que juega, que son mucho más entretenidos que la gran mayoría de los que comienzo a ver y dejo al cuarto de hora. Aprecien lo que tenemos y disfruten pues vendrán tiempos de patadón y tentetieso, de aburrimiento y desilusión. Y ya no valdrá para nada lamentarse.
Foto: Real Betis Balompié
Y si te fijas bien, cuando metemos un gol ni lo celebran. Eso por lo menos pasa con mis vecinos de localidad, e igual de amargados como bien describes.
Son “tan grandes béticos”, que prefieren perder o que nos eliminen de copa a ver si echan de una vez a Setién.
Ese es el nivel. No dan más de sí, y a estas alturas, aunque ganemos un título se van a bajar del burro. Son obtusos, y argumento cero. Bueno sí, se informan gracias a grandes programas deportivos radiofónicos con tertulianos contrastados, y enormes editoriales en la prensa deportiva de esta ciudad.
Datos y juego en la mayoría de los casos irrefutables. 18 meses lleva este cuerpo técnico aquí y le han dado la vuelta a este equipo como un calcetín, generando un estilo alabado por una gran mayoría, aficionados, técnicos y jugadores, que analiza lo que hacemos, lo que eramos y hacia donde vamos. Jugadores que llegan aquí como Canales, gracias a Setién. Un proyecto en absoluto crecimiento, posiblemente el que más en Europa. Sin techo por ahora.
Ellos se lo pierden. Que pongan la tele y vean el fútbol de Bordalás. Después que se imaginen lo que tenemos en plantilla y si ese sistema les sirve. Joaquín y Lo Celso, van a correr como pollos sin cabeza, mañana por la mañana. Esos grandes jugadores y los que llegarán, vienen por nuestra propuesta, por jugar bonito. Propuesta con sus aciertos y errores, claro, porque es fútbol, que un juego y no una ciencia matemática.
He compartido tu artículo en un grupo que tengo de béticos porque coincido al 100 %, con todo lo que comentas. Por desgracia es así, aunque también es verdad que hay veces que Quique (al que siempre he apoyado, por que creo que es el mejor entrenador que podemos tener), hace cosas que cuesta trabajo defender, por ejemplo lo que tarda en hacer los cambios, cuando todos estamos viendo que hay jugadores que ya no pueden más (por ejemplo Joaquín). O lo que le ha pasado con Barragán (que ya parece solucionafo) y Sergio León.