Real Betis Balompié 2 (Guardado y Tello) – Girona FC 2 (Portu los dos)

Pablo Caballero Payán @pablocpayan Pese a rescatar un punto en el último suspiro, el Betis volvió a realizar un partido nefasto y preocupante. El bajón en el juego y el rendimiento es un hecho evidente y las alarmas deben ser activadas. Es intolerable dar la imagen que ha dado el equipo de Setién en la mayoría de los partidos del último mes y medio.

Los verdiblancos empezaron el encuentro atenazados, faltos de la confianza necesaria para competir de verdad. A punto estuvo el Girona de adelantarse en una clara ocasión antes del minuto 10. El Betis se deshizo del dominio del rival y, a pesar de no brillar, tuvo tres ocasiones clarísimas para lograr el 1-0. Erró todas ellas y en el descuento de la primera mitad, Portu aprovechó un garrafal fallo de Tosca para adelantar a los visitantes.

Lo que pasó tras el descanso fue aún más preocupante que lo de la primera parte. El equipo de Machín bailó al de Setién, que se mostró inoperante, torpe y si alma. El técnico cántabro intentó cambiar la dinámica de su conjunto con la entrada de Sanabria y Tello pero, para sorpresa de muchos, sacó el campo a Camarasa y Boudebouz y mantuvo a jugadores que estaban desaparecidos en combate, como Joaquín o Rafa Navarro.

El Girona perdonó claras oportunidades para sentenciar el partido y el Betis, tras una doble ocasión de Tello y Sanabria, empató gracias a un golazo de falta de Guardado. Quedaban cinco minutos para el final y los más optimistas veían posible la victoria y los menos daban por bueno el punto. Sin embargo, en el 93 Portu aprovechó una nueva jugada indolente de un defensa bético (Durmisi esta vez) y puso el 1-2. La tragedia se consumaba y la afición comenzaba a desfilar por el graderío cuando Tello resolvió con calidad la última jugada del partido para llevar las tablas al marcador.

El equipo en Setién necesita un reseteo, una mejora inmediata y radical de las prestaciones defensivas y más velocidad y verticalidad en las jugadas de ataque. Las alarmas deben activarse y tomar decisiones que cambien el rendimiento del equipo. No hablo de un cambio de entrenador, pero si de una distinta manera de afrontar los encuentros.

LO MEJOR: el golazo de Guardado y la definición de Tello.
LO PEOR: todo salvo las dos jugadas elegidas como “lo mejor”