Athletic Club de Bilbao 2 (Aduriz de penalti y Muniain) – Real Betis Balompié 1 (Rubén Castro)

Pablo Caballero Payán @pablocpayan Derrota de un digno Betis en su visita a Bilbao. El rival, que lucha por meterse en los puestos que dan acceso a la Europa League, tuvo que trabajarse duramente la victoria en el tramo final del partido. La reacción de los de Víctor fue insuficiente pero contaron con oportunidades para empatar el encuentro.

El equipo de Valverde mandó en el partido desde primera hora. El poste en una ocasión y las intervenciones de Adán en otras privaron a los vizcaínos de adelantarse en el marcador durante la primera mitad. El Betis buscó sin éxito contragolpes que pusieran en apuros a los rojiblancos. El habitual 5-3-2 fue cambiado por un 5-4-1, con Rubén Castro muy solo y aislado en la punta del ataque bético.

Tras el descanso, el Athletic le metió más intensidad al partido. Salío con una marcha más y consiguió perforar la portería verdiblanca al transformar Aduriz un penalti que Mandi le hizo a él mismo. Poco después, Muniain aprovechó un pase de Raúl García (previo control con la mano) para, a priori, sentenciar el partido. Pero solo tres minutos después del segundo gol bilbaíno, Rubén Castro aprovechó un despeje blando de Kepa para recortar distancias.

En el tramo final del partido contó el Betis con dos claras oportunidades para haber empatado el resultado. Rubén Pardo se encontró con la espalda de Yeray y Rubén Castro mandó al segundo anfiteatro un pase de Ceballos dentro del área. Los locales contragolpearon con peligro pero siempre se encontraron con las acertadas intervenciones del portero bético.

Al Betis, de aquí a final de Liga, se le debe exigir que, al menos, compita con dignidad y busque el mayor número de victorias posibles. Ya que resultará imposible alcanzar el objetivo de estar entre los diez primeros de la tabla clasificatoria, lo mínimo que pueden ofrecer es un poco de dignidad para finalizar una decepcionante y triste temporada.

LO MEJOR: las intervenciones de Adán y la ovación de San Mamés a Joaquín.

LO PEOR: que solo se fue al ataque cuando y el resultado era difícil de remontar.